Aplicación, ¡pero segura!
Aplicación, ¡ahí acaban tus datos!
La búsqueda de un empleo adecuado requiere mucha paciencia. Una vez encontrada la oferta adecuada, es hora de presentar la solicitud, ¡pero rápido! Porque un famoso proverbio dice: "No es poco tiempo el que tenemos, sino mucho tiempo el que no utilizamos" (Sokrades).
Así que coge el ordenador, teclea tus datos, redacta tu carta de presentación y listo. Ahora toca esperar y ver qué pasa. Al cabo de un rato, recibes una respuesta aleccionadora o positiva. Hasta aquí todo bien, pero ¿qué pasa con los muchos datos personales?
También en este caso, la protección de su datos personales
Divulgación y criba de los datos de los solicitantes
Cuando se inspeccionan los documentos de solicitud, se consulta al director gerente, al comité de empresa y a otras personas, además del empleado responsable de personal. Los datos se comprueban y comparan. Por supuesto, todos los implicados están obligados a guardar secreto. Quién es adecuado y quién no. No obstante, incluso con los datos de los solicitantes, la divulgación debe limitarse estrictamente. Los empleados que no participan en el proceso de solicitud no pueden ver los datos.
Períodos de conservación
Los datos de los candidatos podrán conservarse mientras no se haya cubierto el puesto. Después, la empresa debe destruir los datos y toda la información relacionada.
Salvo que: el solicitante consienta el almacenamiento de sus datos.
Por supuesto, una declaración de consentimiento es inevitable para el proceso de solicitud.