Proyecto de la Comisaria de Interior de la UE, Ylva Johansson, sobre el control de los chats y otras medidas en el espacio digital está recibiendo críticas de distintos sectores. Johansson, sin embargo, no se deja amilanar y afirma que la aprobación del control del chat es sólo cuestión de tiempo.

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Proyecto de Johansson sobre el control del chat

La Comisaria de Interior de la UE, Johansson, presentó su proyecto en una reunión ministerial de la UE. En la lucha contra los abusos sexuales a menores en Internet, dijo, colabora sobre todo con la Ministra Federal del Interior, Nancy Faeser.

Entre otras cosas, el proyecto contiene la obligación de que los servicios de mensajería, las redes sociales y los proveedores de alojamiento reconozcan y denuncien el material abusivo (el llamado control de chat). Hoy en día, sin embargo, los servicios de mensajería en particular se basan en el cifrado de extremo a extremo de los contenidos enviados, que habría que eludir en caso de control.

 Johansson defiende su proyecto diciendo que no prescribe ninguna tecnología sobre cómo debe llevarse a cabo el control del chat. Más bien, esto vendría determinado por el nuevo centro de la UE previsto en.

Además, el borrador también contiene temas como la verificación de la edad por parte de las tiendas de aplicaciones.

Crítica de Faeser al control del chat

Aunque Johansson dijo que se alegraba de contar en sus planes con el apoyo de Nancy Faeser, Ministra Federal de Interior, recientemente expresó sus críticas en relación con el control del chat. Faeser declaró que quería "apretar las riendas contra los autores que infligen una violencia terrible a los niños". Sin embargo, no se debe interferir en la comunicación privada encriptada. Faeser dijo que esto afectaría a muchas personas que no tenían nada que ver con los delitos.

Críticas de la coalición semafórica al control del chat

La coalición del semáforo subraya el gran logro de la comunicación privada lejos del control estatal. Por ello, varios ministros y diputados se mostraron críticos con la propuesta de control del chat.

El Ministro de Justicia Marco Buschmann (FDP) se posicionó como "muy crítico". Rechaza tal "medida de vigilancia exhaustiva de la correspondencia privada, especialmente en el espacio digital". Para él, los controles del chat "no tienen cabida en un Estado constitucional".

El Ministro de Asuntos Digitales, Volker Wissing (FDP), expresó su "preocupación". Considera que el llamado control del chat es una "intromisión en el espacio protegido de la confidencialidad de la comunicación".

Preocupaciones constitucionales

Incluso desde un punto de vista puramente constitucional, pueden plantearse objeciones al llamado control del chat. Por supuesto, el objetivo es importante y correcto. Sin embargo, el proyecto deja muchas preguntas sin respuesta. La forma exacta de las obligaciones que afectarían a las empresas sigue sin estar clara. Sobre todo, esta falta de claridad se debe a que no está claro cómo se puede evitar que el control del chat se convierta en pura vigilancia masiva. En este caso, la autoridad europea de coordinación tendría acceso a una gran cantidad de mensajes privados. A la luz de las sentencias sobre retención de datos, no es evidente que un control tan fundamental de las comunicaciones privadas resista el escrutinio de los derechos fundamentales.

Conclusión

El llamado control del chat persigue objetivos correctos e importantes. Sin embargo, la aplicación en la versión actual parece insostenible. Especialmente las preocupaciones constitucionales deben ser atendidas con mayores esfuerzos para hacer justicia a la protección de la infancia, preservando al mismo tiempo la encriptación de los mensajes digitales.

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